Las puntas abiertas, también conocidas como “horquillas”, son uno de los signos más visibles del cabello dañado. Aparecen cuando la fibra capilar se desgasta, se reseca o se rompe, lo que hace que el cabello luzca opaco, áspero y sin vida. Aunque la solución más rápida es cortar, existen formas naturales de mejorar su apariencia y prevenir que sigan subiendo.
En este artículo aprenderás cómo reparar y cuidar las puntas abiertas sin necesidad de tijeras, usando ingredientes naturales y buenos hábitos.
¿Qué causa las puntas abiertas?
- Uso excesivo de calor (planchas, secadores, rizadores)
- Falta de hidratación y nutrición
- Lavados frecuentes con productos agresivos
- Cepillado brusco o cabello enredado
- Exposición al sol, cloro o sal
- Abuso de tintes y decoloraciones
¿Se pueden “cerrar” las puntas abiertas?
Técnicamente no. Una vez que la hebra capilar se divide, no se puede unir de forma permanente. Sin embargo, sí es posible mejorar su apariencia, sellarlas temporalmente y prevenir que empeoren o se rompan más.
1. Mascarilla de aceite de coco y aloe vera
Ingredientes:
- 1 cucharada de aceite de coco
- 1 cucharada de gel de aloe vera
Modo de uso:
- Mezcla y aplica en las puntas secas o ligeramente húmedas
- Deja actuar 30 minutos (o toda la noche)
- Lava como de costumbre
- Repite 2 veces por semana
2. Baño de aceites nutritivos
Los aceites vegetales sellan la cutícula y previenen la resequedad.
Aceites recomendados:
- Argán
- Almendras dulces
- Jojoba
- Ricino
Modo de uso:
- Aplica unas gotas en las puntas limpias y húmedas
- No necesitas enjuagar si usas poca cantidad
- También puedes hacer un prelavado de medios a puntas
3. Mascarilla de plátano y miel
Hidrata, suaviza y fortalece el cabello desde el interior.
Ingredientes:
- 1/2 plátano maduro
- 1 cucharada de miel
- 1 cucharada de yogur (opcional)
Modo de uso:
- Tritura y mezcla bien
- Aplica en las puntas por 30 minutos
- Enjuaga con agua tibia y shampoo suave
4. Evita el calor directo
Mientras estás reparando tus puntas, evita:
- Planchas y rizadores
- Secadores sin difusor o a alta temperatura
- Exposición prolongada al sol sin protección
Si usas calor, aplica siempre protector térmico.
5. Sécalo con cuidado y no lo frotes
Frotar el cabello mojado con la toalla lo debilita aún más.
Envuelve el cabello en una toalla de microfibra o camiseta de algodón, presionando suavemente para quitar el exceso de agua.
6. Usa un sérum o crema para puntas
Puedes preparar un sérum casero con:
- 1 cucharada de aceite de argán
- 1 cápsula de vitamina E
- 3 gotas de aceite esencial de lavanda
Aplica en las puntas tras el lavado para sellarlas y suavizarlas.
7. Protege tu cabello al dormir
- Usa fundas de satén o seda
- Haz una trenza suelta o coleta baja
- Evita dormir con el cabello mojado
Estos hábitos reducen el frizz, la fricción y la rotura.
Prevención: la mejor reparación
Aunque puedes mejorar el aspecto de tus puntas, lo ideal es evitar que se dañen nuevamente. Hidrata regularmente, recorta un poco cada 2 o 3 meses y protege tu melena del calor y los químicos agresivos.
Tu cabello crecerá más fuerte… y con puntas sanas.